QUINTANA ROO

Buscan procesar con Insectos los residuos plásticos para convertirlos en proteína agrícola en la Riviera Maya

Sustainsect propone un innovador sistema para convertir plásticos en proteína y biofertilizante mediante el uso de larvas, involucrando a hoteles y recolectores en un esfuerzo por reducir el impacto ambiental y fortalecer la producción agrícola en la Riviera Maya.

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Biofertilizante obtenido tras el procesamiento de plásticos con insectos.Créditos: Eduardo De Luna

La empresa Sustainsect presentó en un encuentro de turismo sostenible su propuesta para abordar el problema de los residuos plásticos en la región, mediante un sistema de bioprocesamiento con insectos capaz de transformar estos desechos en proteína y biofertilizante para uso agrícola.

Isaac de la Rosa, representante de la compañía, explicó que el proyecto busca integrar a hoteles y colectivos de recolección de residuos como proveedores de materiales como unicel, poliestireno, PET y polietileno, que actualmente terminan en los rellenos sanitarios. La meta es aprovecharlos como recurso productivo, reduciendo el impacto ambiental y beneficiando a productores del campo.

De acuerdo con De la Rosa, la propuesta incluye un trabajo coordinado entre la iniciativa privada y dependencias del gobierno municipal, a través de la Secretaría de Desarrollo Económico para el contacto con pequeños productores, y la Secretaría de Turismo para el vínculo con la industria hotelera.

“Queremos mejorar y reforzar este ángulo para ser un destino turístico auténticamente sostenible”, señaló.

El modelo utiliza larvas de la familia Tenebrionidae, conocidas por su capacidad de consumir plásticos y convertirlos en materia orgánica. Estos insectos, presentes de forma natural en distintas regiones del mundo, se alimentan del material en periodos que pueden ir de horas a días, gracias a su alta densidad en contenedores de procesamiento.

Sustainsect calcula que, una vez que la planta opere a su máxima capacidad, podrá procesar alrededor de dos toneladas de plásticos al mes, lo que equivale a un porcentaje significativo de los residuos generados en la Riviera Maya. El resultado esperado es la obtención de 700 kilogramos mensuales de proteína para uso agrícola y 300 kilogramos adicionales de biofertilizante.

La estrategia no pretende incentivar la generación de nuevos plásticos, sino ofrecer una salida productiva para los desechos existentes. La empresa espera que la mayor parte del material provenga de hoteles que separen y entreguen sus residuos, así como de los colectivos que realizan jornadas de limpieza en playas y zonas urbanas.

De la Rosa destacó que la tecnología no requiere grandes espacios, lo que permite manejar altos volúmenes de residuos en instalaciones compactas. Además, la proteína obtenida podrá ser utilizada como insumo en la alimentación de animales de granja, mientras que el biofertilizante se destinará a mejorar la productividad de suelos agrícolas de la región.