El secretario general de la CROC en Quintana Roo, Martín de la Cruz, informó que el sindicato mantiene un emplazamiento a huelga contra el hotel Parnassus, ubicado en la zona hotelera, por el incumplimiento en el pago de utilidades, salarios, prestaciones y propinas a su personal. El estallamiento está programado para el próximo 18 de agosto a las 9:00 horas, en caso de no llegar a un acuerdo.
De la Cruz señaló que la empresa no ha entregado utilidades ni prestaciones mínimas, y que incluso ha retenido las propinas destinadas a los trabajadores, a pesar de que éstas provienen directamente de los clientes. El dirigente sindical advirtió que se busca un acuerdo previo para evitar el paro, ya que la huelga afectaría al destino turístico, aunque subrayó que es un recurso legal para garantizar el pago de las deudas laborales.
Actualmente, el conflicto involucra a aproximadamente 160 empleados, aunque la cifra varía debido a que algunos han renunciado al no recibir su salario. El emplazamiento incluye a todo el personal sindicalizable, incluidos trabajadores que la empresa considera “de confianza” pero que, de acuerdo con la ley, pueden ser sindicalizados.
El líder croquista indicó que esta situación también afecta a un centro de hospedaje en Tulum, propiedad de la misma empresa. Este inmueble, conocido como “Core”, enfrenta problemas financieros y tiene un emplazamiento a huelga fijado para finales de septiembre. En ambos casos, los inmuebles quedarían en garantía hasta que se cubran los adeudos a las y los trabajadores.
En cuanto al cumplimiento general de las prestaciones laborales en el estado, De la Cruz afirmó que este año las utilidades se han pagado en la mayoría de las empresas, y que en los casos en que no hubo reparto por carátulas fiscales en ceros, se han logrado acuerdos de bonos compensatorios. Además, reportó que los contratos colectivos de trabajo se están cumpliendo gracias a la gestión de los líderes sindicales en cada centro laboral.
Respecto a las negociaciones salariales, señaló que en el último año se logró un incremento promedio del 10%, por encima de la inflación, gracias a la capacitación y certificación de los trabajadores, lo que ha permitido mejorar sus condiciones económicas.
Sobre la reducción de la jornada laboral a 40 horas semanales, recordó que la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) propuso que la implementación sea gradual, para que el sector empresarial pueda adaptarse. Explicó que el compromiso fue asumido públicamente por la presidenta de la República, quien aseguró que antes de concluir su mandato entrará en vigor la disminución de la jornada laboral, con una reducción escalonada hasta alcanzar las 40 horas en 2030 o antes.
De la Cruz reiteró que el objetivo del sindicato no es perjudicar al sector turístico, sino garantizar el respeto a los derechos laborales y el pago de lo que corresponde a cada trabajador.
“No es terquedad de la organización sindical; es un tema de justicia para las compañeras y compañeros que laboran en esa fuente de empleo”, concluyó.