La Secretaría de Educación de Quintana Roo (SEQ) y el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), suscribieron un acuerdo de cooperación, uniendo esfuerzos y recursos para llevar a cabo acciones orientadas a promover el funcionamiento eficiente y efectivo del Programa de Alimentación Escolar en los centros educativos de nivel básico.
Mediante el Nuevo Acuerdo por el Bienestar y Desarrollo de Quintana Roo, promovido por la gobernadora Mara Lezama Espinosa, se otorga prioridad a una educación de alta calidad, humanista, transformadora y solidaria, en particular para los niños, niñas, jóvenes y adolescentes que más lo necesitan.
El objetivo del acuerdo es coordinar la implementación de medidas para implementar la política de ayuda social que favorezca la mejora de las condiciones de vida de los individuos beneficiarios y la reducción de las desigualdades.
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En su mensaje, la secretaria de Educación, Elda Xix Euán, destacó que: “La formalización del convenio representa un compromiso a conciencia, de corazón, de trabajo ético para favorecer a las juventudes y a la niñez que no tienen la posibilidad de recibir un alimento caliente en su casa”.
“Nos congratulamos de asistir a la firma de este convenio con el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia, no sin antes decir que más allá de unas palabras, estamos hermanando acciones a favor de quienes más lo necesitan, porque es muy valioso que hoy, un niño tenga una comida caliente”, mencionó.
Afirmó que se siente aún más complacida al conocer la situación de las áreas rurales que durante mucho tiempo no han sido atendidas, y que ahora, gracias a la colaboración cercana del DIF y el compromiso de la gobernadora Mara Lezama Espinosa, estamos alcanzando lugares donde anteriormente no se alcanzaba, especialmente ahora que contamos con un gran proyecto de un estado en cambio.
La responsable de la SEQ indicó que en ese proyecto buscan reducir las brechas de desigualdad social, que es uno de los objetivos del trabajo de la Gobernadora. Esto implica que todos tengan las mismas oportunidades. Sin embargo, añadió que resulta complicado si un niño o joven ha llegado a la escuela sin obtener una comida caliente.
El acuerdo establece el compromiso de ambas partes de cooperar en el proceso de transición de la alimentación escolar de alimentos fríos a calientes, incluyendo la identificación de los planteles que aspiran a tal transición, teniendo en cuenta aspectos de infraestructura, disponibilidad de espacios, viabilidad operativa y enfocándose en el nivel de marginación y las condiciones de atención prioritarias.
La población destinataria de las acciones del acuerdo se refiere a niñas, niños y adolescentes que asisten a instituciones públicas del Sistema Educativo del Estado, situadas en municipios, localidades o Áreas Geoestadísticas Básicas (AGEB) rurales, urbanas o indígenas con un alto grado de marginación, o con un alto grado de atraso social.
Además, se brindará atención a niñas, niños y adolescentes que asisten a escuelas públicas del Sistema Educativo Estatal con una prevalencia superior o equivalente al 15 por ciento de alumnos con desnutrición, sin importar el nivel de marginación.
Una vez cubierta la población escolar mencionada previamente, se podrá incorporar a la cobertura a cualquier institución educativa para promover y expandir la cobertura de alimentación escolar en su versión caliente.