La disputa política entre importantes grupos en Tabasco, uno encabezado por el gobernador Javier May y el otro por el actual líder de los Senadores de Morena, Adán Augusto López, lleva muchos años, pero la sangre llegó al río hace casi nueve meses con una balacera en un antro de Villahermosa que dejó un saldo de seis jóvenes ejecutados y otros 10 más gravemente heridos.
Hay que conceptualizar los hechos: por primera vez aparecieron en escena el nombre de Hernán Bermúdez Requena, hoy prófugo de la justicia, y el de un grupo delincuencial denominado “La Barredora”.
En el hecho sangriento de noviembre de 2024, el ya gobernador Javier May no dudó en señalar a Bermúdez Requena, quien fungió como secretario de Seguridad Pública del sexenio anterior que inició gobernando Adán Augusto, como protector y hasta propietario del antro en cuestión, y de ser cabeza y defensor de las mafias tabasqueñas.
En revire, el ahora senador trató de desestabilizar el gobierno de May, a quien responsabilizaba de la inestabilidad en la seguridad tabasqueña. Se hablaba, incluso, de un interinato en esa entidad.
Hay que poner en el escenario que ambos fueron gente muy cercana a Andrés Manuel López Obrador durante su sexenio, incluso Adán Augusto fue su secretario de Gobernación casi los seis años. May, por su parte despachaba en las oficinas de Fonatur y tenía en su encomienda importantes proyectos, incluso políticos.
Por ello, Javier May llegó a la gubernatura y ahí mostró sus cartas al nombrar como su secretario de gobierno a José Ramiro López Obrador, hermano de Andrés Manuel.
Es evidentemente que para Adán Augusto, el nombramiento de José Ramón no le cayó nada bien, pues rompía con su esquema de mantener el control del llamado “Grupo Tabasco”, al cual se le atribuyen imponer condiciones en lo político, lo económico y hasta en la (in) seguridad ciudadana.
Al darse a conocer la orden de aprehensión y la fuga de Bermúdez Requena se habla de una gran fisura en esta estructura en esa entidad conocida por su gran actividad agrícola, particularmente con la producción de plátanos, y ganadera, con grandes y productivos ranchos extensos.
Y dicen que, en los círculos cercanos del senador, éste le atribuye la ruptura al hermano del ex presidente, de quien fue, o es, su padrino político y que durante los seis años de su mandato fue su impulsor y protector.
¿Cuál será a partir de ahora la suerte política de Adán Augusto, quien hace poco más de seis años era políticamente el segundo hombre más fuerte del país?
Y, después de la decepción de Andy López Beltrán, ¿será José Ramiro el heredero político de su hermano?
Caída: De cuanto habrá sido la debacle política del PVEM luego del deslinde de Morena, que hoy hasta de las encuestas lo excluyen.