Un nuevo aumento en las tarifas del transporte foráneo tipo van entre Playa del Carmen, Cancún y Tulum tomó por sorpresa a miles de usuarios que utilizan este servicio diariamente. Las nuevas tarifas, que alcanzan los 60 pesos por viaje, representan un incremento que no ha sido informado ni autorizado por el Instituto de Movilidad del Estado de Quintana Roo (IMOVEQROO), lo que ha generado inconformidad entre los usuarios, especialmente trabajadores que dependen de este medio para desplazarse.
Según usuarios del transporte, el alza se aplicó de manera unilateral por parte de las concesionarias y sin previo aviso. El trayecto de Playa del Carmen a Tulum pasó de 50 a 60 pesos, mientras que el viaje a Cancún centro cuesta ahora 55 pesos, y hasta la avenida Kabah, 60 pesos. Estas tarifas ya se encuentran en operación en las unidades identificadas como vans de sindicatos locales.
“Hace un año costaba 40 pesos el viaje. Luego subió sin aviso a 50. Ahora, otra vez, 60 pesos. Es más de 2,400 pesos al mes, y con lo que gana uno, se vuelve insoportable”, explicó Alberto.
Maestro de música que viaja todos los días de Playa del Carmen a Tulum para dar clases.
“Ya antes había puesto mi queja al IMOVEQROO por WhatsApp. Me contestaron pero no hicieron nada. Después el número dejó de funcionar. Es un juego injusto y abusivo.”
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Además de los tramos largos, los destinos intermedios también sufrieron aumentos proporcionales en sus tarifas. La falta de información oficial ha provocado confusión entre los usuarios, ya que ni en redes sociales ni en medios oficiales del IMOVEQROO se ha emitido algún posicionamiento sobre estos cambios.
Organizaciones ciudadanas y usuarios frecuentes han señalado que este tipo de aumentos son parte de una práctica recurrente en el servicio foráneo, donde los operadores implementan nuevas tarifas sin autorización previa. A esto se suma la percepción de que las autoridades no actúan con firmeza frente a las decisiones tomadas por los sindicatos de taxistas, quienes controlan una parte significativa del transporte en la región.
“No es solo el aumento. Es la forma: sin aviso, sin diálogo, sin respaldo legal. Y al final, quienes sufrimos somos quienes usamos este transporte todos los días para trabajar”, agregó otro usuario consultado.
En años anteriores, los aumentos no autorizados han sido objeto de denuncias ante el Instituto de Movilidad del Estado, pero hasta la fecha no se han reportado sanciones visibles contra las concesionarias responsables. El desmantelamiento de canales de atención como la línea de WhatsApp para denuncias también ha limitado la capacidad de los ciudadanos para hacer valer sus derechos como usuarios del servicio.
En un contexto donde el transporte público representa uno de los principales gastos mensuales para trabajadores, estudiantes y personas de escasos recursos, la falta de regulación efectiva sobre las tarifas del transporte foráneo genera un impacto directo en la economía familiar.
Hasta el cierre de esta edición, el Instituto de Movilidad no ha emitido comunicado alguno sobre la legalidad del nuevo ajuste tarifario ni sobre las acciones que tomará ante las denuncias ciudadanas.