El gobierno federal continúa con la rehabilitación de la carretera federal 307 Chetumal-Cancún, concentrando los trabajos actualmente en la prolongación de la avenida Álvaro Obregón de la ciudad de Chetumal.
La carretera federal 307 ha registrado un desgaste crítico en los últimos meses, con al menos 170 baches contabilizados en el tramo comprendido entre Chetumal y la comunidad de Limones. Este deterioro se debe principalmente al constante tránsito de vehículos pesados utilizados en la construcción del Tren Maya.
Para atender esta problemática, las labores de repavimentación se están realizando en dos frentes y en tres turnos, lo que ha permitido un avance del 65 por ciento en promedio. El titular de la Secretaría de Obras Públicas, Rafael Lara Díaz, informó que los trabajos se llevan a cabo en horario nocturno en la medida de lo posible para reducir afectaciones a los automovilistas.
“Estamos avanzando rápidamente y conforme a lo programado, buscando minimizar las molestias para la población”, afirmó.
La inversión total para la rehabilitación de la vía oscila entre los 60 y 70 millones de pesos, y se prevé que las obras continúen hasta finales del año 2025. La Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transporte (SICT) y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) son las encargadas de realizar las reparaciones en los distintos tramos de la carretera federal afectados por el Tren Maya.
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En el tramo de Tulum hacia la capital del estado, las obras son supervisadas por la Sedena, que actualmente trabaja en la comunidad de Limones, a la altura del entronque a Mérida, Yucatán. Las autoridades han destacado que se labora todos los días para garantizar el cumplimiento de los plazos establecidos.
“Se espera que concluyan a finales de mayo, afortunadamente van muy rápido y conforme a lo programado”, aseguró Lara Díaz.
Un caso similar se vive en la carretera 307 entre Playa del Carmen y Cancún, donde, debido a la presencia de maquinaria y la reducción a un solo carril de circulación, el tiempo de traslado ha aumentado hasta una hora y media. No obstante, se espera que una vez concluidas las reparaciones, el tiempo promedio de viaje regrese a los 40 minutos habituales.
“Sabemos que estos trabajos generan inconvenientes, pero son necesarios para garantizar una vía segura y en óptimas condiciones”, concluyó el funcionario.
Las obras de rehabilitación buscan mejorar las condiciones de la infraestructura vial y garantizar la seguridad de los automovilistas que a diario transitan por esta importante vía de comunicación en Quintana Roo.