En un mes, las hectáreas afectadas por incendios en Quintana Roo tuvieron un incremento de 365%, lo cual provocó que ayer la Comisión Nacional Forestal (Conafor) declarara al estado como ecosistema sensible a estos siniestros.
Consecuencia de las altas temperaturas y malas prácticas del ser humano, el Centro Estatal de Manejo del Fuego (CEMF) informó que, del 20 de abril al 20 de mayo, las zonas dañadas pasaron de dos mil 600 hectáreas a más de 12 mil.
De dicho total, seis mil 780 corresponden a desastres activos, en tanto, cinco mil 315 son de casos que ya fueron liquidados.
El organismo indicó que, hasta el 20 de mayo, había en Quintana Roo 13 puntos activos, entre los que está uno en el área protegida de Yum Balam, en el municipio de Lázaro Cárdenas, que reporta una afectación a vegetación tipo pasto sobre una superficie de mil 500 ha. A estos siniestros se suman 31 que ya quedaron liquidados en esta temporada, que dañaron cinco mil 315 ha, de las cuales cuatro mil fueron en el municipio de Bacalar.
Omar Echazarreta, encargado de enlace de Protección Civil de Othón P. Blanco con la Conafor, dijo que Quintana Roo se encuentra como ecosistema sensible debido a los incendios. Explicó que, con base en estudios realizados por la Secreta-